
Día mundial del Teatro 2025
Compartimos el mensaje del director griego, Theodoros Terzopoulo, promovido por el Instituto Internacional de Teatro (IIT) en el marco por el Día Mundial del Teatro.
“¿Puede el teatro escuchar la llamada de auxilio que nuestros tiempos están enviando, en un mundo de ciudadanos empobrecidos, encerrados en celdas de realidad virtual, atrincherados en su sofocante privacidad? ¿En un mundo de existencias robotizadas dentro de un sistema totalitario de control y represión en todos los ámbitos de la vida? ¿Le preocupa al teatro la destrucción ecológica, el calentamiento global, la pérdida masiva de biodiversidad, la contaminación de los océanos, el derretimiento de los polos, el aumento de los incendios forestales y los fenómenos meteorológicos extremos? ¿Puede el teatro convertirse en una parte activa del ecosistema? Durante muchos años, el teatro ha sido testigo del impacto humano en el planeta, pero le resulta difícil abordar este problema.
¿Se preocupa el teatro por la condición humana tal como se está configurando en el siglo XXI, donde el ciudadano es manipulado por intereses políticos y económicos, redes mediáticas y empresas que moldean la opinión pública? Donde las redes sociales, a la vez que facilitan la comunicación, sirven como un gran alibi, porque proporcionan la distancia de seguridad necesaria con respecto al Otro. Un sentido generalizado de miedo al Otro, al diferente, al Extranjero, domina nuestros pensamientos y acciones. ¿Puede el teatro funcionar como un taller de coexistencia de diferencias sin ignorar el trauma sangrante? El trauma sangrante nos invita a reconstruir el Mito. Y en palabras de Heiner Müller: “El mito es un agregado, una máquina a la que siempre se pueden conectar nuevas y diferentes máquinas. Transporta la energía hasta que la velocidad creciente hace explotar el campo cultural”, y yo añadiría, el campo de la barbarie.
¿Pueden los focos del teatro iluminar el trauma social y dejar de iluminarse engañosamente a sí mismos? Preguntas que no permiten respuestas definitivas, porque el teatro existe y perdura gracias a las preguntas sin respuesta. Preguntas provocadas por Dionisio, quien pasa por su lugar de nacimiento, la orquesta del teatro antiguo, y continúa su silencioso viaje de refugiado a través de paisajes de guerra, hoy, en el Día Mundial del Teatro. Miremos a los ojos de Dionisio, el dios extático del teatro y el Mito, que une el pasado, el presente y el futuro, el hijo de dos nacimientos, de Zeus y Sémele, expresador de identidades fluidas, femenina y masculina, iracundo y bondadoso, divino y animal, en el límite entre la locura y la razón, el orden y el caos, un acróbata en la frontera entre la vida y la muerte.
Dionisio plantea una pregunta ontológica fundamental: “¿De qué se trata todo esto?” Una pregunta que impulsa al creador hacia una investigación cada vez más profunda en la raíz del mito y las múltiples dimensiones del enigma humano. Necesitamos nuevas formas narrativas destinadas a cultivar la memoria y a forjar una nueva responsabilidad moral y política para emerger de la multiforme dictadura de la Edad Media contemporánea.”
Una vez más desde AADET hacemos eco para celebrar el Teatro y felicitar y agradecer a quienes dedican su tiempo y fuerza en impulsar la actividad teatral en todo nuestro país, con responsabilidad y creatividad.